Gabriela Cimer fue una actriz argentina que alcanzó la fama desde muy joven gracias a su papel de Etelvina Baldasarre en la exitosa serie de televisión jacinta pichimahuida, la maestra que no se olvida. Sin embargo, su vida estuvo marcada por la tragedia y el sufrimiento, culminando en un trágico final el 2 de julio de 198
El éxito en la pantalla chica
En la década de los 80, Gabriela Cimer se destacó en varias telenovelas de Canal 9, convirtiéndose en una de las actrices preferidas del famoso productor Alejandro Romay. Su papel más memorable fue el de Luisina Quesada en ese hombre prohibido en 1986, donde interpretó a una mujer orgullosa que muere al dar a luz al hijo de su amante interpretado por Marco Estell, quien también era su pareja en la vida real. También sobresalió en dos para una mentira interpretando a Natalia Grin, una joven oficinista cuyo amor se ve frustrado cuando su pareja decide seguir una carrera artística.
Además de su carrera en la televisión, Gabriela Cimer también incursionó en el cine y el teatro, demostrando su talento actoral en diferentes géneros.
La tragedia personal
La vida personal de Gabriela Cimer estuvo marcada por la tragedia y el sufrimiento. En 1989, se encontraba en una profunda crisis depresiva y decidió intentar quitarse la vida ingiriendo somníferos. A pesar de estar embarazada de tres meses, lograron salvarle la vida gracias a la intervención médica.
Sin embargo, el 2 de julio de ese mismo año, Gabriela Cimer puso fin a su vida arrojándose desde el balcón del primer piso de la casa de sus padres en Sarandí, partido de Avellaneda, donde vivía con Marco Estell. No dejó ningún mensaje ni explicación, dejando a todos conmocionados por su inesperada decisión.
El escándalo y las acusaciones
Tras la trágica muerte de Gabriela Cimer, su padre acusó a Marco Estell de maltratos y golpes hacia su hija. Estas acusaciones generaron un gran escándalo en el ambiente artístico, y muchos creyeron en la versión del padre de la actriz, considerando que Gabriela había tomado esa drástica decisión como única salida ante la violencia que sufría por parte de su pareja. Marco Estell intentó ingresar por la fuerza al velatorio y al último adiós en el cementerio de Avellaneda, pero se le prohibió el acceso.
No fue el único episodio oscuro en la vida de Marco Estell, ya que en 1992 estuvo involucrado en el caso conocido como la masacre de general villegas, donde seis personas fueron ejecutadas. Si bien se sospechó en un principio que Estell podría estar detrás del crimen, estas acusaciones fueron descartadas y el caso quedó impune.
El legado de Gabriela Cimer
Gabriela Cimer dejó un legado en la industria del entretenimiento, especialmente en la televisión argentina. Su interpretación de Etelvina Baldasarre en jacinta pichimahuida, la maestra que no se olvida quedó grabada en la memoria de toda una generación. A pesar de su corta vida, su talento y carisma la convirtieron en una actriz querida y recordada por muchos.
La trágica historia de Gabriela Cimer es un recordatorio de los desafíos y dificultades que pueden enfrentar las personas en la industria del entretenimiento, así como la importancia de brindar apoyo y cuidado a aquellos que luchan contra la depresión y la violencia.